Archivo: Antropología
Dr. Joan Vendrell Ferré / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos
Con el aumento progresivo de la conciencia ciudadana debido, por una parte, al trabajo incesante de organizaciones académicas, políticas y sociales, y por la otra, al impacto mediático obtenido por casos como los tristemente famosos feminicidios de Ciudad Juárez en Chihuahua resulta ocioso plantearse la necesidad y justificación de investigar el problema de la violencia de género en nuestro país. Por supuesto, no se trata de un problema exclusivo de México; su repercusión es global, aunque la incidencia y las formas varíen según culturas, países y regiones.
Como ejemplos de la preocupación que hoy suscita la cuestión de la violencia de género podemos aludir al impacto mediático que vienen teniendo noticas sobre “castigos” por cuestiones de honor, o sobre prácticas culturales como el sometimiento a formas de vestir incapacitadoras –como la famosa burka-, o la ablación del clítoris practicada en numerosas sociedades africanas e interpretada, desde la perspectiva occidental, como un método de control del cuerpo de las mujeres.
Podríamos sumar a esto: las prácticas de aborto selectivo o infanticidio, ambas con carácter masivo, que están produciendo un déficit de mujeres contabilizado en cientos de millones en determinados países asiáticos ; el matrimonio forzado de millones de niñas denunciado desde hace años por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), o bien la trata, esclavitud sexual o prostitución forzada que, sólo en el ámbito europeo, implica cifras de decenas de miles de mujeres . Por otro lado, en Brasil se contabiliza el asesinato de una mujer cada dos horas , en un clima de impunidad que recuerda los casos de otros países latinoamericanos como Guatemala o el propio México.
Ante esta situación, las campañas y acciones legislativas vienen presentado un balance descorazonador. Incluso en países donde se han dictado legislaciones especiales y se han destinado al combate de esta lacra importantes recursos, los resultados no resultan acordes con las expectativas . Es aquí donde aparece la necesidad y la pertinencia de una investigación sobre el problema que intente ir más allá de los enfoques individualizadores, las buenas intenciones o las declaratorias sobre derechos humanos, para desentrañar las claves de la violencia de género en un nivel más profundo, que nos permita comprender mejor sus causas y proponer nuevas formas de afrontar el problema. En nuestro caso, ese nivel es el antropológico, y nuestro objetivo es ofrecer los elementos para el análisis de la violencia de género como problema antropológico, y no únicamente como problema social. Para ello, consideramos que la violencia sexista debe ser contemplada en el seno del Género en tanto que sistema de supremacía o dominación masculina.
El objetivo principal, o finalidad, de este proyecto es efectuar una aproximación desde la antropología social y cultural al tema de la violencia de género, contemplada como inherente al sistema de supremacía masculina que podemos encontrar en la práctica totalidad de las sociedades humanas conocidas. Como correlativos a dicho objetivo están el de analizar el sistema de género como sistema de supremacía o dominación masculina, así como el de aportar elementos para un análisis antropológico de la masculinidad. Para dar cumplimiento a la finalidad del proyecto, como objetivos operativos del mismo nos proponemos los siguientes:
1) Analizar el género, la dominación masculina y la violencia de género desde una perspectiva genealógica, preguntándonos por sus orígenes y por las razones de su existencia y vigencia en la totalidad de las sociedades humanas conocidas, todo ello a partir de la información etnográfica e histórica disponible al respecto;
2) Analizar los mecanismos por los que se imponen, se transmiten y se mantienen la jerarquía de género y la violencia asociada a ella;
3) Analizar las principales formas que adopta dicha violencia, en una panorámica etnográfica, histórica y también en la actualidad, globalmente y con una especial atención al caso de México.
La metodología empleada en este proyecto es la habitual en las investigaciones realizadas desde la antropología social y cultural, en su vertiente cualitativa. Dadas las características del proyecto, sus objetivos y las metas que se espera obtener, el trabajo de campo debe dejar el lugar preferente a la elaboración teórica. Se prevé el uso de fuentes variadas, desde las bibliográficas a las documentales de todo tipo, recurriendo al trabajo de campo (observación, entrevistas) cuando surja su necesidad en el decurso de la investigación.
1.-En 2007, según la ONU, los abortos selectivos en India y China habían producido un déficit de más de 160 millones de mujeres (EL PAÍS, 13 de noviembre de 2007).
2.-140 mil según cifras de la ONU ofrecidas por EL PAÍS, 30 de junio de 2010.
3.-EL PAÍS, 12 de julio de 2010.
4.-En España, por ejemplo, “las mujeres asesinadas por sus parejas se incrementan pese a la batería de leyes y las campañas de prevención”, mientras “los expertos no logran descifrar por qué la violencia doméstica parece imparable” (Victoria Torres, “¿Por qué los machistas no dejan de matar?”, 02/08/2010, obtenido el 01/08/2010 desde http://www.elpais.com /articulo/sociedad/machistas...).
Joan Vendrell Ferré es profesor-investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos desde 1997. Miembro del Sistema Nacional de Investigadores. Doctor en Antropología Social y Cultural por la Universitat Rovira i Virgili (Tarragona, España). Autor del libro Pasiones Ocultas. De cómo nos convertimos en sujetos sexuales (Barcelona, Ariel). Ha publicado artículos en revistas especializadas y capítulos en libros sobre: masculinidades, violencia sexual y de género, transgeneridad y transexualidad, enfoques teóricos en antropología sexual, medicalización de la sexualidad, nomadismo sexual entre jóvenes y turismo sexual, entre otros temas. Es asimismo co-editor de la Revista de Estudios de Antropología Sexual.