Contaminación Lumínica producida por las ciudades de Mexicali Baja California, y San Luis Río Colorado Sonora.
Contemplar un cielo verdaderamente estrellado es una experiencia que mueve emociones y a la cual todos deberíamos tener derecho. Lamentablemente hoy quedan pocos lugares donde las luces de las ciudades no ahoguen el brillo de las estrellas, fenómeno conocido como contaminación lumínica.
La mayor parte de la contaminación lumínica producida en las ciudades es debido a un alumbrado público ineficiente. Si recordamos, la función del alumbrado público es proporcionar seguridad durante la noche y permitir que realicemos nuestras actividades cotidianas como caminar, conducir y pasear. Para lograr estos objetivos la luz debe ser dirigida hacia el suelo donde es necesitada y por lo tanto, toda luz que escape por arriba del horizonte se definirá como contaminación lumínica.
El derroche constante de iluminación por la noche tiene efectos negativos en el consumo de energía, medio ambiente, seguridad pública, salud e investigación astronómica. Desde el punto de vista económico, toda energía utilizada para iluminar fuera del área necesitada, es un desperdicio de recursos. El dirigir adecuadamente la luz, puede permitir usar sistemas de iluminación de menor potencia permitiendo un ahorro. En cuestiones de medio ambiente y salud, la mayoría de los seres vivos cuentan con un ciclo regulatorio dependiente de la cantidad de luz en el ambiente. Al estar expuestos a un mayor número de horas de luz, los ciclos migratorios en aves, reproductivos en reptiles y de sueño en humanos se ven seriamente afectados. La investigación astronómica óptica también se ve afectada, ya que la luz que escapa de las ciudades rebota en las partículas suspendidas en la atmósfera creando un velo de luz que opaca los objetos astronómicos de estudio.
En la Sierra de San Pedro Mártir, Baja California se encuentra el Observatorio Astronómico Nacional (OAN), operado por el Instituto de Astronomía de la UNAM, sus condiciones geográficas y atmosféricas producen uno de los cielos más oscuros de Norteamérica.
Observatorio Astronómico Nacional, con la Vía Láctea de fondo.
Para proteger este recurso natural, astrónomos del OAN se reunieron con autoridades municipales y estatales para promover legislaciones enfocadas a la conservación del cielo oscuro. En el año 2006 se aprobó el Reglamento para La Prevención de la Contaminación Lumínica en el municipio de Ensenada, la cual es conocida popularmente como la Ley del Cielo. En este reglamento se establece que el alumbrado exterior, no debe de emitir luz por arriba del horizonte. En el año 2010, se modificó la Ley Estatal de Protección al Ambiente para incluir a la contaminación lumínica, y en el 2011 el municipio de Mexicali también aprobó un reglamento similar.
Con estas medidas se espera conservar las condiciones de la Sierra de San Pedro Mártir por las siguientes décadas y garantizar el crecimiento en infraestructura del Observatorio Astronómico Nacional. Más información en http://leydelcielo.astrosen.unam.mx
ºDr. Fernando Ávila Castro / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
Instituto de Astronomía sede Ensenada, UNAM.