Revista de Divulgación Científico-Tecnológica del Gobierno del Estado de Morelos

Garrapatas bajo control biológico

Archivo: Parasitología Veterinaria
Dr. Manuel Fernández Ruvalcaba / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
CENID-Parasitología Veterinaria-INIFAP.

En el proyecto de control biológico de la unidad de artrópodos del Cenid-Parasitología Veterinaria, ante la creciente demanda, las garrapatas han sido el tema principal de estudio y experimentación con el objetivo de encontrar nuevas formas de combatir estos parásitos que se alimentan de sangre en su fase adulta a través de la piel (ectoparásitos) de diversos animales como mamíferos, aves, reptiles etc. Son transmisores de una gran variedad de enfermedades que afectan animales y al humano, algunas graves y hasta mortales, son difíciles de combatir y más aún de controlar, su ciclo de vida puede ser en un sólo animal como la del bovino y la abeja (Varroa destructor) o dos y hasta tres como la del perro (R. sanguineus), para completarse dependiendo de la especie de garrapata.
             En México la garrapata Rhipicephalus microplus de un sólo hospedero es conocida como la garrapata de los bovinos. El número de garrapatas presentes en un bovino sirve para determinar el límite de beneficio económico (umbral) que es de 50 garrapatas aproximadamente por animal pero en las condiciones del trópico y subtrópico húmedos donde se encuentra la mayor cantidad de bovinos, este número es rebasado por mucho. Las garrapatas durante su desarrollo tienen períodos en que son parásitas exclusivamente, con extracción de 0,5 a 2,0 ml de sangre por garrapata, otros de vida libre en el suelo entre el pasto en donde no se alimentan y pueden vivir por meses. Esta garrapata es la que más daño ocasiona a la economía de México porque diminuye la producción de carne y leche de los bovinos, es una limitante para la exportación de ganado y les transmite la anaplasmosis y la babesiosis enfermedades en si mismas graves; por esto se requiere gastar en medicinas y en plaguicidas (acaricidas químicos) para combatirlas, los cuales son costosos y resultan muy dañinos por su alto grado de permanencia y contaminación en el medio ambiente. Sin embargo las garrapatas han presentado gran resistencia ante este tipo de plaguicidas, lo que ha hecho que la industria sintetice productos cada vez más tóxicos y esto a su vez ha contribuido al aumento del problema de la resistencia pues actualmente ya es de tipo múltiple contra la mayoría de las familias químicas de dichos compuestos con el consecuente daño de las poblaciones existentes en el ecosistema.
            Las garrapatas tienen en su medio ambiente enemigos naturales tales como hongos, nematodos y bacterias que les producen enfermedad y muerte, pero también ciertas especies de hormigas, avispas y aves las depredan desde el huevo hasta el adulto de la garrapata, algunas a nivel del suelo como las hormigas o sobre el bovino como algunas aves, sin embargo existen ciertos atributos generales para que estos enemigos naturales sean efectivos. Desde el punto de vista de la economía agropecuaria, un enemigo natural efectivo es aquel capaz de regular la densidad de población de una plaga y mantenerla en niveles abajo del umbral económico establecido para un determinado parásito en este caso de interés pecuario.
           El control biológico en el ramo veterinario en México a pesar de tener ya cierta experiencia acumulada sobretodo en la última década, con la garrapata R. microplus y algunas moscas, es aún insuficiente para controlar por si sólo problemas como el de la resistencia de las garrapatas en ciertos estados de la republica, como Tamaulipas Veracruz, y todo el sureste mexicano que junto con lo bovinos presentes en la zona de trópico y subtrópico húmedos suman 21 millones de cabezas de ganado aproximadamente en zonas de riesgo de garrapatas. El pastizal es el hábitat natural del bovino y materia especializada de la agricultura, por lo que la experiencia ganada en agricultura sobre el tema a lo largo de muchos años de investigación, aplicabilidad y comercialización a gran escala, brindan material para ser considerado durante el desarrollo de estudios de control biológico pecuario, tanto de las buenas como de las malas experiencias, ya que algunas especies probadas en agricultura son las mismas de interés, especialmente en nuestro caso de las garrapatas, y moscas que afectan a los bovinos, además de otros ácaros y piojos.
              Aunque se han utilizado una diversidad de especies de enemigos naturales en una gran cantidad de programas de control biológico de índole agrícola, las especies que han demostrado ser efectivas poseen en común ciertas características que deben ser consideradas en la planeación y conducción de nuevos programas. En general, los enemigos naturales más efectivos comparten las siguientes características: (a) Adaptabilidad a los cambios en las condiciones físicas del medio ambiente; (b) alto grado de especificidad a un determinado parásito; (c) alta capacidad de crecimiento poblacional con respecto al parásito que se afecta; (d) alta capacidad de búsqueda, particularmente a bajas densidades del hospedero/presa; (e) capacidad de sobrevivir periodos en los que el hospedero esté ausente; y (f) mostrar densidad-dependencia. En general los mismos principios son aplicables para el control biológico veterinario. Por ejemplo; la capacidad de búsqueda ha sido señalada como el atributo individual más importante, debido a que esta habilidad permite que el enemigo natural sea capaz de sobrevivir incluso a bajas densidades de su hospedero/presa. Sin embargo, un enemigo natural no tendría una capacidad de búsqueda sobresaliente si no posee otra o varias de las demás características mencionadas. Por lo tanto, el enemigo natural ideal debe poseer una buena combinación de todos los atributos posibles.
           Se ha determinado a nivel experimental en las áreas de estudio del laboratorio de control biológico, algunas de ellas en condiciones de campo, que la etapa conocida en el ciclo biológico de las garrapatas como de “encuentro garrapata-hospedero” es decir cuando la larva de garrapata pasa de la vegetación al animal puede ser el momento de intervención de algunas alternativas de combate con ciertas especies de pastizales, trampas con cebos(feromonas) o practicas de manejo que afectan a la larva negativamente utilizando las condiciones climáticas siempre a nuestro favor y en contra de la garrapata. Para establecer un programa de control de la garrapata R. microplus el conocimiento mínimo de la “dinámica poblacional” es un factor a considerar de suma importancia que se ha estudiado en nuestro laboratorio y áreas de experimentación.
            La curva poblacional de esta garrapata puede presentar de tres a cuatro picos en condiciones de subtrópico y trópico y húmedo y de dos a tres en subtrópico seco, por lo que se debe determinar con exactitud el inicio del pico poblacional para poder implementar alternativas de combate en este momento, incluida la química y no durante el alza o el pico máximo, por lo que también es necesario crear conciencia entre los productores y gente que trabaja directamente con los bovinos, que el combate de la garrapata R. microplus es complejo y deben adquirir un conocimiento que va más allá de sólo abrir una botella, mezclar, bañar y repetir, aunque esto sea lo más fácil, pero a lo largo lo más costoso, por lo que es conveniente ubicar físicamente y en el tiempo el ciclo de la garrapata en el pastizal. La relación entre factores físicos como la temperatura ambiental, precipitación y humedad relativa deberían ser correlacionados con los picos poblacionales de la garrapata previamente determinados por monitoreo de las fases de larva en pastos y adulto en bovinos, para así ubicar con precisión los momentos de intervención pero si dejar de considerar con que, como, cuando y cuanto, para afectar a la garrapata exitosamente, o sea un programa planeado dentro de un manejo integrado de plaga (MIP), el cual si es a nivel regional será mucho más efectivo.
           En el laboratorio de control biológico de garrapatas se ha experimentado con algunas especies de hongos y bacterias entomopatogenos. Hongos principalmente de los géneros Metarhizium sp. y Beauveria sp. y de las bacterias algunas cepas de Bacillus thurigiensis. Se han hecho estudios para determinar la patogenicidad de cepas de origen nacional obtenidas de la colección de hongos entomopatogenos del Centro Nacional de Referencia en Control Biológico-SENASICA de Tecoman, Colima y ciertos aislados de campo obtenidos de algunas garrapatas con síntomas de enfermedad. Con ellos se han realizado experimentos sobre la infectividad, patogenicidad y concentración letal mínima a nivel in vitro, así como de factibilidad de control en bovinos bajo condiciones de estabulación, y cobertizos en zonas abiertas, solos o combinados con otros productos de origen natural amigables al ambiente. Los resultados han demostrado el efecto acaricida de algunos de ellos hasta en más del 80%. Lo cual es aceptable dada la adicionabilidad de las alternativas del control biológico, al contrario de la alternativa puramente química. Por tal motivo nuestro proyecto está avocado actualmente a encontrar los apoyos suficientes para pasar estas tecnologías a su fase de validación en condiciones reales de campo en zonas ganaderas.


Manuel Fernández Ruvalcaba es medico veterinario zootecnista por la Universidad Autónoma de México(UNAM). Realizó estudios de maestría en parasitología animal en la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) y de Doctorado en Ciencias Biológicas en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). Actualmente es responsable del laboratorio de control biológico de la unidad de artrópodos del CENID-Parasitología Veterinaria-INIFAP.