A lo largo de la historia el ser humano ha utilizado plantas para curar diversas enfermedades. Actualmente un 60% de los medicamentos empleados para el tratamiento del cáncer fueron obtenidos de compuestos producidos por las plantas, que después de aislarse y purificarse se sintetizaron por procedimientos químicos en un laboratorio.
Los medicamentos llamados Vincristina, Etopósido y Paclitaxel, que se usan como tratamiento para diversos tipos de cáncer (de próstata, cerebro, esófago, páncreas, vejiga, colon, leucemia, pulmón, ovario, entre otros), se obtuvieron a partir de compuestos presentes en la raíz o corteza de las plantas vinca de Madagascar, la mandrágora, y árbol tejo del pacífico, respectivamente.
En México contamos con plantas medicinales que tienen compuestos que podrían utilizarse para tratar el cáncer. Algunas plantas cuyas propiedades han sido estudiadas en un laboratorio son las siguientes:
- Orégano: Compuestos extraídos de sus hojas disminuyen la multiplicación de células de cáncer de colon.
- Chacloco o coloradillo: Disminuye la multiplicación de células de cáncer cervicouterino (CaCu).
- Asclepia o algodoncillo: Disminuye la multiplicación células de CaCu, próstata y pulmón.
- Tomatillo o tomate verde: De esta planta se aislaron unos compuestos llamados withanólidos que protegen a ratones contra el cáncer de hígado. Además, disminuye la multiplicación de células de cáncer de colon, riñón y piel.
- Copal: Compuestos extraídos de sus hojas disminuyen la multiplicación de células de cáncer de mama.
- Kabal piich o kaam bal: De la corteza y raíz se asilaron compuestos llamados Secundiflorol e Espinochalcona que causan la muerte de células de CaCu y cáncer de próstata.
Podemos concluir que las plantas medicinales mexicanas son fuente de compuestos con potencial actividad contra el cáncer; sin embargo, falta profundizar en su estudio e identificar su mecanismo de acción.
En el laboratorio evaluamos el efecto de compuestos obtenidos de diversas especies de plantas y hongos mexicanos sobre el crecimiento de células tumorales, algunos compuestos son buenos candidatos, ya que inhiben la multiplicación de estas células; no obstante, aún tenemos mucho trabajo por realizar para comprobar sus propiedades.
Dra. Carla O. Contreras Ochoa / Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Usted necesita tener Javascript activado para poder verla.
Centro de Investigación sobre Enfermedades Infecciosas del Instituto Nacional de Salud Pública.